jueves, 6 de agosto de 2015

Niños Envueltos: "Nos gusta lo que nos da escalofríos"


Me debía esta nota hace rato. Niños Envueltos es un suspiro en la escena underground de Buenos Aires, un poco de aire cálido entre tanto indie chispeante: el grupo apuesta a la canción donde las tensiones van por otro lado y no se crece desde la pisada de un pedal de distorsión sino desde la suma, de a poco, de todas las partes (al clásico guitarra-bajo-batería ellos le agregan vientos, teclas y cuerdas varias).

Hace dos años recibí su disco debut, El último casette del parque, un poco por casualidad (amigos en común con miembros de la banda). Desde entonces, tenía sentido hacer el contacto y hablar con Tonga, la peculiar voz que susurra las siete canciones de ese último casette que se pasa volando en poco más de 20 minutos encantadores. Charlamos del disco que ya empezaron a concebir, de cómo funciona la composición dentro del grupo, el innegable influjo de cierto pop británico (en particular, Belle and Sebastian) y la insólita denuncia de una compañía discográfica que dio origen al nombre de su único álbum a la fecha.

LA REDENCIÓN DEL CASETE

Empecemos por el final. El último casette del parque ya tiene casi dos años, ¿están en el proceso de armado de un nuevo disco?
Sí, estamos preparándonos para grabar dentro de un par de meses. El fin de semana pasado nos fuimos con los instrumentos y equipos a la casa de un amigo en Villa Domínico, estuvimos sábado y domingo ahí en su cuarto grabando los demos. Las canciones ya las tenemos y los arreglos están casi todos, ahora más que nada estamos buscando el sonido que queremos para cada tema.
Después del recital de hoy vamos a dejar de tocar por unos meses para poder terminar de armarlo, grabarlo, mezclarlo y todo eso.

El debut parece perseguir un concepto ligado a la niñez/adolescencia. ¿Ese costado conceptual en las letras es algo que intentarán repetir o sucedió un poco de casualidad?
No me había dado cuenta de lo que me decís,  pero nos lo han dicho varias veces, puede que suceda por el nombre de la banda, por la forma de cantar y porque el disco arranca con “La feria”, que es una canción que nació un poco inspirada en “El oficio de ser mamá” de Macaferri & Asociados.

Digamos que fue casual, entonces.
En realidad, salvo el nombre del disco, el resto sucedió todo por azar, elegimos las canciones que más nos gustaban en ese momento.  Pero sí, en el próximo disco queremos repetir el método y que el azar disponga. Nosotros vamos a estar de acuerdo con él.

¿Es cierta la anécdota de que te denunció una compañía por vender grabaciones de shows en vivo en el Parque Rivadavia (y de ahí viene lo de “el último casette...”)?
Es cierta, sí. Grababa los recitales y los casetes los vendía los domingos en la feria de música del Parque. Con esa plata iba a ver bandas y me compraba discos, lo hice de los 17 a los 23 años, que fue cuando una multinacional me denunció.

¿Cómo te llegó la denuncia?
Mandaron un allanamiento policial a mi casa y justo mi tía entró al edificio mientras buscaban testigos en la puerta, así que se enteró y nos avisó por el portero eléctrico (risas). Cuando entraron revisaron todo, vaciaron los placares y dieron vuelta los colchones buscando las grabaciones. No las encontraron porque mientras ellos subían por el ascensor, con mi hermano las llevábamos por la escalera a lo de mi tía que vivía dos pisos más abajo (más risas).
Igualmente agarraron catorce CDs copiados que había entre los discos de mi hermana y armaron la causa. Me hicieron ir a declarar varias veces a Tribunales, una ronda de reconocimiento y un juicio oral. Todo muy absurdo. Me declararon culpable y me dieron la probation, una libertad condicional por un año con asistente social todos los meses, tenía que ir y convencerla a la señora de que no iba a volver a delinquir (risas). De ahí viene lo de El último casette del parque.

Increíble. ¿Planean editar nuevamente en ese formato, o aquella vez la idea de editar en casete vino ligada sólo al nombre del disco? ¿Son fetichistas?
No planeamos editarlo en casete. En realidad, del primer disco sólo hicimos trece casetes para regalar a algunos amigos, los regrabamos arriba de algunos que me habían sobrado del parque. La confusión viene por el nombre del disco, pero en realidad lo editamos en CD y también puede bajarse gratis en el Bandcamp.

Ahora muchos grupos están volviendo a editar en casete y también en vinilo. ¿Les interesa esa posibilidad o es inviable por los costos?
Nos encantaría editar los discos en vinilo porque nos gusta como suena y quisiéramos tener las tapas grandotas, pero sale muy caro y no se puede.



CON QUIÉN TOCAR, CON QUIÉN ESCRIBIR

Quizá sea una visión equivocada, pero pareciera que en el under argentino predominan bandas más cercanas a lo noise que al sonido que ustedes proponen. ¿Lo sienten así, les cuesta encontrar bandas para armar fechas?
También pienso que predominan más esas bandas, algunas nos gustan y otras no, pero lo mismo nos pasa con las que tienen un sonido más acústico o folk, creo que eso no depende tanto de la forma sino más bien de la esencia. A nosotros nos gusta lo que nos da escalofríos. Pero igual no nos cuesta encontrar bandas para compartir fechas, si las armamos nosotros tratamos de tocar con bandas con las que nos sentimos cómodos por alguna razón.

¿Cómo llevás la composición a la banda? Porque componer para un septeto te obliga a pensar de otra manera el lugar de los instrumentos en una canción. En algunas notas contaste que las canciones del disco debut fueron saliendo a la vez que el grupo se armaba...
Y... a mí las canciones me salen tocando acordes con la acústica y cantando arriba, dejo que salga solo, sin pensar, como la escritura automática pero con melodías, palabras, algunos papa papas y turu turus. Si encuentro algo que me gusta lo sigo hasta que se hace una canción y lo que llevo a la banda es eso, se las canto con la guitarra.

Pero hoy que la formación ya está afianzada, ¿el proceso de composición es el mismo o se piensa desde antes el espacio para cada uno?
Para armar el disco que estamos por grabar nos estuvimos juntando bastante fuera de la sala con Franchi (el guitarrista) y Fede (el baterista), Franchi es quien hace la mayoría de los arreglos, sobre todo las orquestaciones o partes melódicas y Fede tiene el ritmo en la sangre, mucha musicalidad y una cabeza muy curiosa. Entre los tres nos complementamos muy bien. Después los temas los terminamos en la sala tocando todos juntos y vamos cambiándolos mucho hasta que todos sonreímos. Así que cada uno aporta algo, siempre.

Una de sus bandas favoritas es Belle and Sebastian. En unos meses van a estar tocando en Argentina, ¿qué darían por ser la banda invitada?
Nos gusta mucho Belle and Sebastian, sí. Sobre todo sus primeros 4 discos y los EPs de esa época. A ellos podríamos darles abrazos y cariños. A los que organizan el recital plata no les podemos dar porque no tenemos, no sé, ¿Dejamos que se queden con toda la plata de Sadaic? (Risas). ¿Sabés con quién tendríamos que hablar? ¡Yo igual con que no pongan de nuevo a abrir al exbaterista de Catupecu Machu estoy conforme, eh! (Risas finales).


*Hoy jueves 6 de agosto a las 22 horas, Niños Envueltos se presenta junto a Franny Glass (Uruguay) en Club Cultural Matienzo (Pringles 1249, CABA). Entrada: $50.